Razones por las cuales el Islam permite la Poligamia

Razones por las cuales el Islam permite la Poligamia

 

Todos los mandatos de la religión del Islam provienen de Dios, el Sabio, y por eso uno deduce que todas las cosas que están permitidas lo están por el hecho de que su beneficio para el ser y la sociedad pesan más que su perjuicio. Cuando uno analiza las razones y resultados de permitir la poligamia, se encuentra con que las reglas de la religión del Islam son aquellas que verdaderamente se adaptan a todos los tiempos y lugares, porque su fuente es Dios Todopoderoso, el Sabio y el Conocedor.

Cómo lo indica el Corán (4:3), el tema de la poligamia se entiende a la luz de las obligaciones de la comunidad hacia los huérfanos y las viudas. El Islam, como una religión universal que se adapta a todos lo tiempos y lugares, no puede ignorar esas obligaciones.

La poligamia islámica apunta a problemas sociales como la prostitución y las relaciones extramatrimoniales tan comunes en Occidente. En lugar de engañar – la infidelidad es una de las principales razones de divorcio en Occidente – el Islam permite al hombre casarse con más de una esposa. Con el total reconocimiento de los derechos de ambas. El principio básico en el Islam es que los hombres se responsabilicen de sus comportamientos para con las mujeres así como también las mujeres para con los hombres.

El número de mujeres en el mundo excede al de los hombres. El excedente es resultado de los hombres que mueren en las guerras, crímenes violentos y mujeres que viven más tiempo que los hombres.[1]  La homosexualidad incrementa más el problema. Bertrand Russell escribió: “En todos los países en donde hay un excedente de mujeres, es injusto que esas mujeres, por necesidad aritmética, deban permanecer solteras y privadas de la experiencia sexual.”[2]  La poligamia, entonces, es la única solución responsable para esta situación.

 

País[3]

Población Masculina

Población Femenina

Rusia

46.1%

53.9%

Gran Bretaña

48.6%

51.5%

USA

48.8%

51.2%

Brasil

49.7%

50.27%

 

Tomemos por ejemplo a los Estados Unidos. ¿Por qué se expanden tanto las relaciones extramatrimoniales? “Una razón es la cantidad de mujeres. La mayoría están solteras, (en la actualidad hay 34 millones en los Estados Unidos) y porque las mujeres solteras generalmente tienen mas tiempo libre y energía que las casadas. Tomemos en cuenta estas estadísticas: Una de cada cinco mujeres hoy no tiene un potencial compañero simplemente porque no hay suficientes hombres solteros. Una mujer soltera de 25 años se enfrenta a un serio desabastecimiento de hombres disponibles, y la situación se empeora cuando las mujeres envejecen. Es menos probable que los hombres divorciados vuelvan a casarse (y tienden a casarse con mujeres menores que ellos), por lo tanto hay el doble de mujeres solteras que de hombres solteros a los 40. De hecho, una mujer que se divorcia hoy en día a los 35 es probable que permanezca soltera por el resto de su vida. atrapadas en un problema demográfico al buscar la autonomía, más y más mujeres solteras optan por iniciar relaciones con hombres casados.”[4]

Además, un porcentaje de mujeres que no son mantenidas económicamente por sus esposos son la causa del incremento de la prostitución en la sociedad. Por ejemplo, Alemania posee 0.96 hombre/mujer. Ante el bienestar de las reformas alemanas, ¡cualquier mujer de menos de 55 que ha estado sin trabajar por más de un año, puede ser forzada a tomar un trabajo disponible - incluyendo ser prostituta en la industria sexual - o perder su beneficio de desempleo! En un estudio del año 1994 se encontró que el 16% de los hombres mayores de 18-59 en los Estados Unidos había pagado por sexo (Gagnon, Laumann, and Kolata 1994).

También, el problema de la desequilibrada proporción de sexos puede empeorar durante la guerra. La Segunda guerra mundial fue un fenómeno de este tipo. Después de la Segunda guerra mundial había 7.300.000 más mujeres que hombres en Alemania solamente (3,3 millones de ellas viudas). Había 100 hombres de entre 20 y 30 años cada 167 mujeres de la misma edad. Muchas de esas mujeres necesitaban un hombre, no solo como compañero sino también como proveedor para el hogar en un tiempo de miseria y apuros. Los soldados en el ejército de los Aliados explotaron la vulnerabilidad de estas mujeres. Muchas mujeres jóvenes y viudas  tuvieron relaciones amorosas con miembros de las fuerzas dominantes. Muchos soldados norteamericanos y británicos pagaban por su placer con cigarrillos, chocolates y pan.[5]

La poligamia es una alternativa al divorcio en el caso de problemas matrimoniales. En lugar de divorciarse de una mujer enferma o estéril, el Islam permite al hombre casarse con otra cuidando de la primera si esta elige permanecer con él.

Las enseñanzas del Islam, incluyendo la poligamia, conforman la naturaleza humana. Los hombres y mujeres difieren en sus deseos de variedad sexual. Estas diferencias son universales. De acuerdo a los científicos evolucionistas los hombres son “programados” para repartir su semilla. Los hombres de cualquier parte del mundo – solteros o casados – quieren más parejas sexuales que las mujeres. La solución islámica provee la única alternativa responsable al deseo arraigado del hombre.[6]

Existe una reserva biológica universal en la reproducción femenina y masculina. La capacidad reproductiva de la mujer declina después de los 20 y termina en la menopausia, pero el hombre posee, todavía hasta en los 70 años la capacidad de engendrar un hijo.[7]  La poligamia es una solución para el hombre que desea tener más hijos, especialmente en las sociedades agrarias tradicionales. Esto puede parecer irrelevante en el contexto occidental en donde tener hijos se está convirtiendo en algo independiente al matrimonio. La poligamia es también una alternativa para un hombre que desee satisfacer sus deseos sexuales naturales dentro de los lazos del matrimonio, pero cuya esposa no lo desee por edad o enfermedad. Además el Islam prohíbe las relaciones durante el ciclo menstrual de la mujer. Por lo tanto, el ciclo menstrual prolongado de la mujer que previene al hombre tener sexo con ella, o un hombre cuyo impulso sexual no sea satisfecho por su esposa, puede casarse con otra mujer. El Islam les permite a esos hombres realizar sus deseos dentro de un marco legal, responsabilizándose  de su sexualidad, para no tener que recurrir a la cohabitación o la prostitución. La poligamia legalizada controla la transmisión de enfermedades sexuales como Herpes y HIV. Estas enfermedades venéreas se esparcen en las sociedades en donde son comunes las relaciones extramaritales y la prostitución. Esto puede llegar a suceder por un marido que trae la enfermedad con la que él se ha infectado con una relación extramatrimonial cuando regresa a la relación monogámica con su mujer.

Se puede ver claramente que existen muchos beneficios resultantes en la poligamia. Muchas enfermedades sociales no son tratadas, hasta creadas o empeoradas, gracias a las restricciones a la poligamia en las relaciones modernas. No se debe atribuir a la cultura y la época actual la superioridad en la historia, sino que se debe analizar las costumbres, tradiciones y creencias basadas en hechos sólidos y tangibles. Cuando las personas lo hacen, con la mente y el corazón abiertos, se acercarán a la verdad hasta que la apreciarán tan clara y evidente como la luz del día.

 


Footnotes:

[1] De acuerdo al Centro de Estadísticas Mundial de la Salud, la esperanza de vida de la mujer en los Estados Unidos es de 77.9 años, mientras que la de los hombres es solo de 70.3.

[2] Matrimonio y Morales, p. 47

[3] La Nueva Enciclopedia británica, vol. 17, pp. 34, 270, 244.

[4] Laurel Richardson “Another World; More and More Single Women Are Opting for Affairs with Married Men, and the Trend Is Diminishing Feminist Progress” Psychology Today, vol. 20, February 1986.

[5] Ute Frevert, Las mujeres en la Historia Alemana: desde la Emancipación Burguesa hasta la Liberación Sexual (New York: Berg Publishers, 1988) pp. 257-264 citado por el Dr. Sherif Abdel Azim, “Las mujeres en el Islam Versus Las mujeres en la Tradición Judía-Cristiana: Mitos y Realidades.”

[6] Schmitt, D.P., "Diferencias sexuales universales en el deseo de la variedad sexual: Pruebas de 52 naciones, 6 continentes y 13 islas” Revista de la Personalidad y la Psicología Social, 85, 85-104. El Estudio fue conducido por el Psicólogo de la Universidad de Bradley, David Schmitt y publicado en la Revista de la Personalidad y la Psicología Social, su alcance fue impresionante: Involucró 16.288 estudiantes de 50 países en Las Américas, Europa, África, y Australia.

(Fuente: http://www.bradley.edu/academics/las/psy/pdfs/schmitt%5B1%5D%5B1%5D.etal.2003.jpsp.pdf)

[7] Bruce Bower, “Darwin’s Minds”, Science News Vol. 140 No. 15, October 12, 1991, p. 233-4.