El significado de “Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo
Escribo este mensaje luego de leer un artículo. Cerca del final mencionaba una situación: Al-Lalka’ narró que cuando un hombre calumnió a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella) en presencia de Al-Hásan Ibn Zaíd, él ordenó ejecutarlo. Alguien le dijo: “Él pertenece a nuestro grupo”, pero Al-Hásan replicó: “Buscamos refugio en Dios de esto, este hombre calumnió al Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Dios Todopoderoso dijo: “Las perversas son para los hombres perversos, y los hombres perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas mujeres tendrán a su lado hombres buenos, y los hombres buenos [como el Profeta Muhámmad] sólo tendrán a su lado mujeres buenas”. Entonces, si ‘Aa'ishah fue tan mala mujer, el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Dios sean con ambos) también lo es. Este hombre es un agitador”. Entonces fue ejecutado.
¿Cuál es la explicación de ese verso? Yo tuve una experiencia personal. Me casé con una muchacha que yo pensé que era religiosa. Mi objetivo era formar un hogar musulmán honorable, hacer mi mejor esfuerzo de seguir el ejemplo del Profeta Muhámmad y de sus compañeros (que la paz y las bendiciones de Dios esté con todos ellos). En resumen, yo no investigué bien acerca de esta muchacha antes del matrimonio, y luego descubrí que era terrible. Que Dios tenga misericordia de ella y de mí. La mayoría de todo lo que dijo eran mentiras y engaños. Yo no sentí que ella tuviera ningún interés o preocupación por el Islam o por la honradez. La divorcié después de que me di cuenta que no iba a cambiar, a pesar de que tenemos un hijo.
Yo amo el Islam y quisiera que mi esposa fuera religiosa, y me indigna la gente inmoral, especialmente si no se avergüenzan de lo que hacen, e insisten, y hasta se vanaglorian de ello.
Mi matrimonio y divorcio fue la experiencia más amarga que tuve en mi vida. Ahora temo repetir ese error. Yo quisiera encontrar a alguien que me ayude a ser más religioso, no menos. ¿Cómo puedo estar seguro, cuando hay tanta gente afecta a mostrar exactamente lo opuesto de lo que es en realidad? Especialmente cuando se trata de asuntos del matrimonio.
Antes de que me casara con esta mujer yo recé la oración de al-istijárah muchas veces consultando a Dios, en ocasiones lloré y le pedí a Dios que me guíe, especialmente porque vi algunos malos signos por parte de ella o de su familia, que indicaban que no eran gente religiosa. No estoy tratando de decir que no es mi culpa, ni tratando de decir que no cometí ningún error en esta relación. Pero yo amo a Dios y al Islam, y soy muy celoso de las normas islámicas, y no soporto la mentira.
En resumen, yo no creo que esté en mis manos elegir correctamente aun si pregunto acerca de todo y recopilo información sobre una muchacha, o pongo a prueba de alguna forma su personalidad antes del matrimonio. A menos que Dios tenga misericordia de mí y me bendiga con una esposa piadosa.
El matrimonio hoy en día se ha convertido en algo muy difícil. Por Dios, yo creo que es de los asuntos más difíciles de la vida, y la parte más difícil es encontrar a una pareja moralmente apta. Pienso que es imposible, a menos que Dios lo permita. Cuando leo o escucho el verso mencionado, me siento muy triste; ¿significa esto que yo elegí a mi esposa anterior porque la merecía?
Yo sé que esto es una prueba de parte de Dios, pero quisiera que usted me diera una explicación clara del verso, y si es posible, un alivio a mis dudas.
Odgovor
Alabado sea Dios
En primer lugar, los exégetas del Corán (que Allah tenga misericordia de ellos) difieren acerca del significado del verso (traducción del significado):
“Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo tendrán consigo mujeres. Son inocentes de cuanto les acusan, sus faltas les serán perdonadas y tendrán una generosa recompensa [en el Paraíso]” (An-Nur, 24:26).
Algunos de ellos dicen que esto se refiere a las buenas y las malas palabras, y que el significado del verso sería “Las malas palabras son para los malas personas, y las buenas palabras son para las buenas personas”.
Otros dicen que se refiere a las buenas y malas acciones. Y que el significado del verso sería: “Las malas acciones son para los malas personas, y las buenas acciones son para las buenas personas”.
Una tercera opinión dice que este verso se refiere al matrimonio, y que el significado del verso sería: “Las malas personas son para los malas personas, y las buenas personas son para las buenas personas”.
Pero la verdad es que no hay razón por la cual este verso no deba ser entendido en todos estos sentidos. Aunque su significado más obvio es el primero mencionado, y esta es la opinión más común entre la mayoría de los eruditos. Luego, el segundo punto de vista.
El shéij ‘Abd er-Rahmán as-Sa’di (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Dios dijo (traducción del significado):
“Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo tendrán consigo mujeres. Son inocentes de cuanto les acusan, sus faltas les serán perdonadas y tendrán una generosa recompensa [en el Paraíso]” (An-Nur, 24:26).
Esto se refiere a todos los hombres y mujeres malvados, con quienes las malas palabras y las malas acciones armonizan; y por otro lado, a todos los hombres y mujeres de bien, con quienes las buenas palabras y las buenas acciones armonizan.
Esta explicación es general, sin excluir nada. Una de las más grandes aplicaciones del significado de este verso es con respecto a los profetas, especialmente los mensajeros. Por ejemplo, Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), que es el mejor de toda la creación, y que sólo los mejores hombres y mujeres estuvieron con ellos”. Fin de la cita.
Por lo tanto, quien calumnia a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella) está calumniando al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), quien era el objetivo original de los hipócritas que inventaron las primeras calumnias conocidas contra ‘Aa'ishah. El mero hecho de que ella fuera la esposa más conocida del Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), es una confirmación de que ella era pura e inocente de todo lo que se la ha acusado.
Entonces, ella está entre las más rectas y piadosas mujeres, entre las más conocedoras y honradas, y por eso fue la esposa del Mensajero de Dios. De hecho, no hay registro de que el Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) recibiera la revelación cuando estaba con alguna de sus esposas excepto con ella.
El verso mencionado confirma todo esto claramente. No hay razones ni evidencias para argumentar lo que los calumniadores han intentado, ni espacio para dudas:
“Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo tendrán consigo mujeres. Son inocentes de cuanto les acusan, sus faltas les serán perdonadas y tendrán una generosa recompensa [en el Paraíso]” (An-Nur, 24:26).
Este verso se refiere principalmente a ‘Aa'ishah, pero por extensión a todas las mujeres creyentes y castas.
“Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo tendrán consigo mujeres. Son inocentes de cuanto les acusan, sus faltas les serán perdonadas y tendrán una generosa recompensa [en el Paraíso]” (An-Nur, 24:26).
Es decir, el perdón de todos sus pecados.
“Y una generosa provisión”, es decir, proveniente de Dios, que significa el Paraíso”. Fin de la cita de Tafsir as-Sa’di, pág. 563.
En segundo lugar, lo que has citado acerca del hombre que calumnió a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella), es cierto. Esto es lo que en su tiempo hizo el gobernante musulmán. Impugnar el honor de ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella) implica descreer del Sagrado Corán, e impugnar a su esposo que confiaba en ella, es decir al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Estas cosas son intolerables en un musulmán que tiene conocimiento de su religión, y no puede pensarse que las dice por ignorancia.
En Al-Mawsú’ah al-Fiqhíyah (22/185) dice:
“Los juristas están unánimemente de acuerdo en que quien calumnia a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella) atribuyéndole las mentiras que se han dicho en el pasado sobre ella, ha descreído de la palabra de Dios en el Sagrado Corán, donde se ha revelado de la forma más clara y evidente la inocencia de ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella). Dios dijo (traducción del significado):
“Y Allah os aclara Sus preceptos, Allah es Omnisciente, Sabio” (An-Nur, 24:18).
Por lo tanto, quien vuelve a reflotar estas mentiras ciertamente lo hace con mala intención, y no puede decirse que sea un creyente.
Ahora, resta el asunto de si todas las otras esposas del Profeta Muhámmad deben considerarse de la misma forma que ‘Aa'ishah.
Los hánafis y los hánbalis, de acuerdo a la opinión más correcta, afirman que todas ellas deben considerarse de la misma honorable manera. Este también fue el punto de vista favorecido por Ibn Taimíyah. Ellos citaron como evidencia el verso en el cual Dios dijo (traducción del significado):
“Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas. En cambio, las buenas tendrán consigo hombres buenos, y los buenos sólo tendrán consigo mujeres. Son inocentes de cuanto les acusan, sus faltas les serán perdonadas y tendrán una generosa recompensa [en el Paraíso]” ( An-Nur, 24:26).
Calumniar a cualquiera de ellas implica calumniar al Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) e impugnar su honor, lo cual es algo prohibido entre los musulmanes.
El otro punto de vista, que es el de los sháfi’is y el otro punto de vista de los hánbalis, es que exceptuando a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella), el resto de las esposas del Profeta Muhámmad son como cualquiera de los otros compañeros del Profeta”. Fin de la cita.
El Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Calumniar a ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella) con acusaciones por las cuales Dios la ha declarado inocente es un acto de incredulidad, porque implica descreer y burlarse del Corán. Con respecto a calumniar a las otras esposas del Profeta Muhámmad, hay dos puntos de vista entre los eruditos. El más correcto de ellos es que también implica un acto de incredulidad, porque implica calumniar al Profeta Muhámmad, quien fue el esposo de ellas y quien confió en ellas, y porque como dice el verso coránico, “Las perversas son para los hombres perversos, y los perversos no estarán sino con mujeres perversas…”. Fin de la cita de Maymu' al-Fatáwa, Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín, 5/ pág. 86).
Ver también la respuesta a la pregunta No. 954.
En tercer lugar, se ha narrado de Abu Hurairah (que Dios esté complacido con él) que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “La mujer puede ser buscada en matrimonio por cuatro cosas: su riqueza, su linaje, su belleza, o por su virtud. Escojan a la mujer virtuosa, y prosperarán”. Narrado por al-Bujari, 5090; Muslim, 1466.
No es imposible para un hombre encontrar una esposa honrada que le ayude a obedecer a Dios y a seguir el camino de la religión; que le honre, eduque a sus hijos, y cuide de su honor y de su propiedad. Si encontrar a una mujer virtuosa hubiera estado lejos de las posibilidades de un hombre, el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) no nos habría encomendado buscarla. Él nos dijo también que hay otras razones por las cuales los hombres suelen buscar desposar a una mujer. Los hombres eligen a las mujeres de acuerdo a sus propios deseos, tradiciones y costumbres, pero el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) nos aconsejó buscar a la mujer virtuosa y comprometida con su religión, y nos aseguró que de esta forma el hogar y la familia prosperarán, y esto el hombre podrá verlo en su casa y en sus hijos.
No debes abandonar las esperanzas de encontrar a una mujer comprometida con su religión y de buen carácter. La comunidad musulmana todavía practica el bien y hay todavía muchas familias musulmanas que educan a sus muchachas en el compromiso con la religión e inculcándoles un buen carácter.
El fracaso en una experiencia matrimonial no significa que lo mismo vaya a sucederte una y otra vez. Lo que te sucedió puede haber sido como bien dijiste una prueba, o un castigo, sin olvidar que tú reconoces no haber tomado las precauciones suficientes al relacionarte con esa muchacha. La gente se conoce entre sí y se mezcla, y el estado de una familia y sus miembros no permanece oculto para sus parientes y vecinos. Los miembros de una familia se encuentran con la gente en la mezquita, en la escuela o durante las visitas, y de esta forma una mujer honrada puede ser distinguida de la mujer corrupta, ya sea por su apego a la religión, por su respeto hacia los demás, etc. Hay todavía cosas que la gente oculta en su interior a todos los demás, y esto es algo que nadie excepto Dios puede conocer. La persona que es engañada por alguien que externamente muestra ser honrada y comprometida con su religión, cuando en realidad en su vida privada es una persona corrupta, no puede ser culpada por haber sido engañada, porque Dios no nos ha pedido que hurguemos en la conciencia de la gente. Más aún, lo que es aplicable a las mujeres entre las cuales tú estás buscando a tu compañera de vida, también es aplicable para ti. ¿Cómo sabe la gente quién eres tú realmente, y qué es lo que guardas en tu interior?
A los tutores se les ha encomendado facilitar el matrimonio de sus familiares femeninas con hombres de buen carácter y comprometidos con su religión, basándose en lo que pueden ver y percibir, como también investigando un poco sobre los parientes y relaciones cercanas del pretendiente. Cualquiera de ellos puede llevarse una impresión incorrecta y ser engañado, tanto por parte de la mujer y su familia, como del hombre y su familia. No debes ponerte ansioso por la experiencia de tu primer matrimonio. Todo lo que debes hacer ahora es aprender de tus errores y buscar con más cuidado, hablando con la gente y preguntando por buenas familias que eduquen bien a sus hijas y que les enseñen actitudes morales. Luego puedes concentrar tus preguntas en la mujer a la que quieres desposar, preguntando a sus compañeros de clase por ejemplo acerca de su compromiso religioso, acerca de su actitud o relación con el prójimo. De esta forma habrás seguido el consejo del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y tenemos la esperanza de que no seas defraudado por la persona que elijas y que ella no sea defraudada por ti.
Le pedimos a Dios que te ayude a hacer una buena elección y te bendiga con una esposa honrada, que te ayude a permanecer casto y a quien tú ayudes a permanecer casta, quien te trate con dulzura y a quien tú trates con dulzura, y que se bendigan el uno al otro con una recta descendencia.
Para más información sobre las cualidades que deben buscarse en una esposa musulmana, por favor consulta las respuestas a las preguntas No. 26744 y 10376.
Y Allah es la Fuente de toda fuerza.